Escritor y periodista costarricense, de intensa y constante trayectoria en el medio cultural de su país. Ha combinado su profesión de abogado con una amplia labor periodística y el ejercicio de la docencia universitaria, en cursos sobre literatura, sobre artes dramáticas, sobre periodismo. Ha desempeñado muy destacados puestos oficiales; entre ellos diputado, embajador ante las Naciones Unidas, Ministro de Cultura. En el campo del periodismo tuvo a su cargo la dirección de importantes medios de prensa como Diario de Costa Rica, La República, Excelsior. Ha mantenido en forma ininterrumplida y a lo largo de más de cuatro décadas, una columna sobre cultura, política, literatura y arte, en diversos diarios costarricenses. Se le reconoce su muy notable su impulso a diversas áreas de la cultura: fundador de la Compañía Nacional de Teatro, gestor del Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes, cofundador de la Editorial Costa Rica. Ha recibido en varias ocasiones el Premio Nacional «Aquileo J. Echeverría» y por la acumulación de sus méritos, el Premio de Cultura «Magón». Su obra literaria es abundante y variada. Como dramaturgo, es autor, entre otras, de Algo más que dos sueños (1956), El luto robado (1962), En agosto hizo dos años (1966), La Segua (1971), Una bruja en el río (1977), Uvieta (1980), Ni mi casa es ya mi casa (1982), Oldemar y los coroneles (1984). Su obras narrativa la integran tres novelas: Feliz año, Chaves Chaves (1975), La soda y el FC (1983) y Los molinos de Dios (1992), y varios tomos de cuentos: Aquí y ahora (1965), La exterminación de los pobres (1974), Los cuentos del Gallo Pelón (1980), Crisantema (1990), Tanto esfuerzo para nada (2004). Ingresó como miembro de número a la Academia Costarricense de la Lengua en diciembre de 1967, con un discurso sobre la vida y la obra de Moisés Vincenzi, que respondió D. José Marín Cañas (†). Ocupó la silla M, de esta institución. Falleció en junio de 2014.